Con el objetivo de reforzar la
prevención y pesquisa precoz, el Servicio de Salud Osorno a través del
encargado del Programa de Capacitación para la Prevención y Diagnóstico Precoz
de Cáncer Colorrectal (PRENEC), Mario Aburto Foitzich, realizó una presentación
en el Centro Diurno del Adulto Mayor (CEDIAM), en sector Rahue Bajo, respecto
de la situación de este tipo de cáncer en nuestro país y en la provincia, así
como la forma de acceder al mencionado programa.
Durante la iniciativa, que es
parte de la planificación del Comité Local del Cáncer, se mostraron cifras
preocupantes respecto del aumento en la incidencia y mortalidad atribuida a
Cáncer Colorrectal en los últimos años, ya que, según las últimas cifras
entregadas por Globocan -Global Cancer Observatory- el año 2020 se detectaron
6.219 nuevos casos en Chile (segundo tipo de cáncer más prevalente) y se
produjeron 3.179 muertes por este tipo de cáncer (tercer tipo que produjo más
muertes), constituyendo un importante problema de salud pública, pero
principalmente en nuestra provincia, en la cual se registran más casos nuevos y
más muertes por año que en el resto del país.
Mario Aburto señaló que “a pesar de
las cifras negativas, lo importante es que este tipo de cáncer se puede
prevenir y solucionar en el 90% de los casos si se logra diagnosticar en una
fase temprana; la manera de prevenir el cáncer colorrectal en pacientes sin
factores de riesgo se realiza mediante un test de sangre oculta en deposiciones
e idealmente con una colonoscopía, a partir de los 45 años, y en aquellos con
factores de riesgo o antecedentes familiares de primer grado con cáncer
colorrectal o pólipos, se debe realizar una colonoscopía a partir de los 40
años”.
Por eso, se reforzó la importancia
de que la población pueda acceder a estas estrategias de tamizaje precoz, con
lo cual es posible detectar y extirpar tempranamente lesiones que pudiesen
evolucionar hacia un cáncer, con el fin de evitar un diagnóstico tardío que
genere la necesidad de tratamientos como quimioterapia, radioterapia o cirugías
complejas que, aunque puedan aumentar la sobrevida, igualmente genera un
impacto importante en las condiciones de vida de las personas afectadas y sus
familias.
Además, se compartieron algunas
recomendaciones preventivas como: priorizar alimentación saludable,
incorporando alimentos más ricos en fibras y antioxidantes y, por otro lado,
disminuir el consumo de grasas o carnes rojas (cerdo y vacuno) y
embutidos, mantener un peso adecuado, no fumar, evitar el consumo excesivo de
alcohol, mantener una actividad física regular y una adecuada hidratación.
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