Si bien los medios de pagos llevan años evolucionando en todo el mundo, los sucesos vividos en el último periodo han sido el gatillante para que la transformación digital se incorpore irreversiblemente en la forma de pagar de la población. Los métodos tradicionales de compra como tarjetas de crédito o débito, han perdido popularidad ante la llegada de sistemas más innovadores.  

 

En efecto, “entre las nuevas metodologías que ha tenido que incorporar el canal digital de ventas, la evolución de los medios de pago cumple un rol fundamental. Las compañías lograron entender que para tener una venta exitosa, la flexibilidad en los medios de pago es clave para la decisión final del consumidor. Mayores opciones para realizar transacciones se traduce en una mejor posibilidad de compra”, asegura Daniel Castro, subgerente de Ecommerce de Adexus.

 

Ante este escenario es relevante saber ¿Qué es una billetera digital? “Son plataformas o herramientas que operan en un dispositivo digital, generalmente es un smartphone, que se utiliza para realizar pagos o transacciones sin la necesidad de realizar contacto, solo es necesario acercar el dispositivo al terminal de punto de venta”, agrega el ejecutivo.

 

Sin ir más lejos, de acuerdo al estudio The Global Payments Report, a nivel global “las billeteras digitales representarán el 51,7 % del total de pagos de e‑commerce para 2024, lo que estará acompañado por una leve disminución en el uso de tarjetas de crédito (al 20,8 %) y tarjetas de débito (al 12 %)”. En el caso específico de Latinoamérica señala que en 2020 las billeteras digitales experimentaron el mayor crecimiento entre los pagos de e-commerce de Latinoamérica, crecieron un 43,5 %, pasando del 13,8 % en 2019 al 19,8 % en 2020. Además, se enfatiza que se prevé que las billeteras digitales superen a las tarjetas de crédito hasta convertirse en el medio de pago predominante en 2024 alcanzando el 31,2 % de las transacciones de e‑commerce.

 

A nivel mundial, es posible apreciar un mayor avance en algunos países respecto a este método de pago. “La utilización de la billetera electrónica seguirá aumentando en los próximos años, debido a que los clientes buscan realizar las compras de la forma más fácil y rápida posible y que mejor que sin tener ningún contacto con más dispositivos. Estos tres simples puntos son lo que más atraen a este innovador sistema, además de permitir reunir toda la información en un solo lugar”, afirma Castro.

 

Sin duda, este aumento de la utilización de herramientas digitales traerá consigo nuevos problemas y desafíos en torno a la ciberseguridad. ¿Cómo se va a proteger los datos del usuario? ¿Cuáles son los límites en torno a la información que se puede contar de cada cliente? Estas son algunas de las preguntas que se tendrán que ir resolviendo con los años y aprendiendo de los errores.